Sucede, que el sabado por la noche ibamos un amigo y yo, de antro por la ciudad. La noche estaba agí¼itadona, asi que decidimos hacer lo que hacemos siempre que esto sucede: Ir al Cantabar. Aqui el ambiente se presta para pistear y disfrutar la noche; y si se tiene algo de suerte, puedes talvez ligar chicas.
Tuvimos suerte y salimos de ahi con dos chicas, decidimos comprar otras cervezas, para ir al tragico mirador de una zona de riquillos en Queretaro. Yo la verdad, ya no queria mas cervezas, asi que decidi no tomar mas. Ibamos los cuatro en el carro de mi amigo y mas tardamos en estacionarnos para apreciar la vista de la ciudad en la noche, que lo que tardo una patrulla de «La Guardia Municipal» en emparejarnos (osea, ponerse al lado nuestro… porque las parejas ya las traiamos nosotros).
Empezo a hacersela cansada a mi amigo y desafortunadamente, el efectivo lo habiamos gastado en las cuatro caguamas «clandestinas» que compramos. Asi que en vista de que el señor de la ley, no vio la manera de sacarnos baro, decidio bajarnos de nuestro vehiculo a los cuatro.
Yo me baje y le dije, que cual era el problema, a lo que inmediatamente me pidio de la manera mas atenta, que no me metiera en la discusion. Yo le dije, que no estabamos haciendo nada malo, asi que pues si no nos decia porque nos detenia, consideraba que nos tenia que dejar ir. Se puso a inspeccionar y vio dos envases vacios y dos llenos sin destapar. Empezo a halegar, que estabamos tomando «en la via publica», cosa que en ese momento no era cierta (talvez media hora antes lo hubiera sido). Finalmente pidio refuerzos y les dijo que me habia visto a mi amigo y a mi, tomando en la via publica… cosa que no era cierta, puesto que no vio a ninguno.
Finalmente los «refuerzos» dijeron que el hecho de que estuvieramos tomados, era motivo de que nos «encerraran», y pues el conductor tenia una falta mas grave. Yo le dije que habia un limite legal y que si traian alcoholimetro, sin duda lo pasaria. El dijo que en el estado de Puebletaro, no existia. Se empezaban a poner espesos asi que opte por darles el avion, ante tanta necedad, ya que amenazaban con darnos de cacles y pue’que hasta gas pimienta nos echaran.
En cuanto me subian a la patrulla, el negritocucurumbrecuidadordelorden dijo sarcasticamente: Tienen suerte, hasta les toco que los paseara en un astra… es el del patron. A lo que yo le respondi: Pues ni tanta, quizas los jodidos solo pueden aspirar a eso. El mono se ofendio y repuso: No hay necesida’ que me insulte joven.
Finalmente, a las chavas les toco regresarse en taxi (eso espero) y seguramente nunca mas las vea (un amor que no puede ser, por culpa del destino), y a mi mientras iba en la patrulla, me hablo mi hermano, al cual le comente que me llevaban al juzgado civico, por faltas a la zoocieda’. Al llegar al juzgado, el estaba ahi y pues despues de una serie de preguntas, al ir con la juez y terminar mi «declaracion», en donde declare todo lo que decian que hice, le pregunto: ¿Oiga, y el baño donde esta, que me estoy haciendo pipi?.
Todos me vieron con cara de cinico, pero pos ya me andaba. Fui al baño, me desahogue.. pague mis $137 pesos, los $137 de mi amigo y me fui. En el recibo dice que por infraccion al Articulo 21 Seccion II, tenia que pagar en IMPUESTOS $137 y en MULTA $0. ME pregunto si sera deducible para mi proxima declaracion.
Finalmente, creo que ese pinche polecia, se sintio bien por establecer el orden publico y yo me senti mejor, porque considero que su ego depende de eso. Ademas, las caguamas que nos confiscaron seguramente las uso el polecia, para la peda que dijo se pondria con otro polecia, instantes antes de meternos al juzgado. Ni lo del importe nos regreso, pero ni modo, seguramente con su sueldo, le hara mas falta a el que ami. Que bueno soy.