Era divertido a sus 18 años cuando tú tenías 18, hablando tonterías en Radioactivo y haciendo tus tardes más amenas: Wiso G, el hamster maravilla, Mini Olallo. Pero el tiempo que nada perdona nos hizo treintañeros, bien que mal la vida nos llevó cuando menos a un nivel más arribita, en tanto que a Olallo lo dejó mentalmente en la adolescencia. Pobre pequeño padawan.
Hoy por la tarde un wey estaba escuchando un podcast viejo de Olallo en el que de hecho dice ¿casi? lo mismo que escribió en R&R sobre el reggaeton «la gasolina» (¿o lo escrito en R&R es ¿casi? igual a lo dicho en el podcast?) y tal nivel de pendejez olallesca me hizo en principio encabronar para después sabiamente meditar y concluir que a Olallo en la vida le han faltado tres cosas.
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