Después de muchos rumores, fotos del programa oficial de la gira filtradas en el feisbuc y tuiter y sobre todo, de que el Tío Manuel Guerrero (el del «club de los bicles» de Universal Stereo) se comportara como Capulina con sus «no sé, puede ser, a lo mejor, quién sabe», finalmente se concretaron los dos conciertos del «divo de Liverpool” en la Ciudad de México dentro del marco de su gira de despedida (de los conciertos masivos) que en este tramo de conciertos en Estados Unidos, México, Puerto Rico, Irlanda y la pérfida Albión tiene el título de «The Up And Coming Tour» los días 27 y 28 de mayo.
Es curioso el fenómeno de la beatlemanía en México; aun más que incluso en su país de origen o en los Estados Unidos, donde solo en ciertas ciudades como Nueva York, aun se tiene un programa semanal dedicado a The Beatles (Breakfast with the Beatles). En el caso de México (al menos en el DF) existen dos horas … diarias! dedicadas a los bicles desde hace ya más de 30 años!
Posiblemente, a mucha gente la sola mención de los Beatles o de Paul McCartney en particular les sea, en el mejor de los casos, indiferente; ya sea porque sencillamente sus respetables gustos musicales son otros o porque de tanto oírlos, les cagan la madre. Sin embargo es impresionante el cómo nuevas generaciones de escuchas casuales y fans que nunca tuvieron la oportunidad siquiera de saber de los pleitos post Beatles o incluso, que les haya tocado vivir el luto de la muerte de John Lennon porque eran muy niños o incluso ni nacían, se identifican con los Beatles; su música y su legado.
El Rock Band, el internet y posiblemente también la piratería han contribuido a que el mito siga vivo y que el interés por las composiciones bicles siga tan vigente hoy como en las décadas pasadas y que esa sea la razón por el interés de ver y escuchar en vivo a quien, para algunos, es el bicle más comercial y menos experimental y por tanto, el más banal … vaya! Es el wey que compone tontas canciones de amor y que no tenía la rebeldía de un Juan Lennon, por decir lo menos.
Sin embargo, es justo decir que quién realmente fue el que comenzó con los experimentos dentro del estudio de grabación y por ende, a experimentar con las (limitadas entonces) posibilidades sonoras que estaban disponibles con la tecnología sesentera, fue Paul y que, por otro lado, a pesar de haber incluido dentro de un disco de los Beatles la canción más “avant garde” del grupo (Revolution No. 9), los gustos musicales de Lennon siempre estuvieron más ligados a la raíces del rock and roll. Evidentemente, junto con George y Ringo, los Beatles le dieron le dieron al rock y la música pop la forma, estilos, sonidos, estructura y dirección que hasta nuestros días persiste (si no, nomás pregúntenle a los hermanitos Gallagher de Oasis).
Posterior a la desintegración de los Beatles, Paul encontró con su nueva banda Wings, el cenit de lo que los Beatles pudieron haber logrado de haber seguido juntos… para bien o para mal. Wings permitió a Paul tener el control total de su banda y por ende, explotar a su antojo su creatividad y por otro lado, mantenerse vigente. Sin embargo, el gusto no le duró mucho; ya sea porque la presión que el mismo se impuso al ser “el Beatle más activo” en la escena musical o porque el estilo de vida del rockstar setentero le afectó por sus excesos, finalmente disuelve Wings en enero de 1980, después del bochornoso episodio de su detención (y posterior reclusión por cinco días) en Japón por posesión de drogas (de hecho, 220 gramos de marihuana). Posterior a este evento, McCartney se recluye de las giras, graba un disco solista [McCartney II] con claras influencias de música electrónica y promete no mas giras por lo que resta del primer lustro de los años ochenta, cuando finalmente retoma el escenario para cerrar el caótico “Live Aid” en el Estadio de Wembley el 13 de agosto de 1985. De ahí, Paul retoma el gusto por salir de gira, reiniciando sus presenatciones masivas en el “The Paul Mccartney World Tour” que inicia el 26 de septiembre de 1989
Especificalemente, Paul McCartney ha visitado 3 veces nuestro país como parte de sus giras mundiales: La primera fue como parte de su gira “The New World Tour” que paso por el (en ese entonces) Autodromo Hermanos Rodriguez los días 23 y 27 de noviembre de 1993, después con el “Driving México Tour” el 2, 3 y 5 de noviembre de 2003 que pasó por el infame “Palacio de los Rebotes” y finalmente, con su Up And Coming Tour, en el Foro Sol los días 27 y 28 de mayo de 2010.
Escoger una buena lista de canciones a interpretar en un concierto es posiblemente el paso más importante para generar una buena comunicación con la audiencia. ¿Qué pasaría si Paul solo tocara cosas de The Beatles? Seguramente, lo acusarían de vampirizar su propio legado y reconocer que sus trabajos posteriores no tenían la mínima calidad para ser recordados. Si solo tocara su material solista o lo de Wings, es posible que los fans de los Bicles le reclamarían el no reconocer su pasado y en ambos casos, ningúna parte quedaría contenta. Por tal razón, Paul cuida mucho los set list de sus conciertos, tratando de buscar el balance correcto entre Beatlemania, su propio catalogo antiguo como solista y algunas cosas que esté promocionando actualmente. Este equilibrio lo podemos ver en el set list de los conciertos del 27 y 28 de mayo en el DF.
Set List del Jueves 27
1. Venus and Mars / Rockshow (W)
2. Jet (W)
3. All My Loving (B)
4. Letting Go (W)
5. Got To Get You Into My Life (B)
6. Highway (P)
7. Let Me Roll It (W)
8. The Long And Winding Road (B)
9. Nineteen Hundred and Eighty Five (W)
10. Let ‘Em In (W)
11. My Love (W)
12. I’m Looking Through You (B)
13. Two Of Us (B)
14. Blackbird (B)
15. Here Today (P)
16. Dance Tonight (P)
17. Mrs Vandebilt (W)
18. Eleanor Rigby (B)
19. Something (B)
20. Sing The Changes (P)
21. Band On The Run (W)
22. Ob-La-Di, Ob-La-Da (B)
23. Back In The USSR (B)
24. I’ve Got A Feeling (B)
25. Paperback Writer (B)
26. A Day In The Life / Give Peace A Chance (B)
27. Let It Be (B)
28. Live And Let Die (P)
29. Hey Jude (B)
Encore
30. Day Tripper (B)
31. Lady Madonna (B)
32. Get Back (B)
Segundo Encore
33. Yesterday (B)
34. Helter Skelter (B)
35. Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band / The End (B)
Set List del viernes 28:
Prácticamente fue el mismo set list con los siguientes cambios
5. Drive My Car por Got To Get You Into My Life (B)
12. I’ve Just Seen A Face por I’m Looking Through You (B)
13. And I Love Her por Two Of Us (B)
A mi gusto, este es el mejor set list de los conciertos masivos de Paul; ya que combina perfectamente su legado Beatle con sus éxitos solistas más algunas canciones no tan conocidas y otras que interpretó por primera vez en vivo, como la increíble “Nineteen Hundred and Eighty Five” del Band On The Run [1974]. Es importante señalar que adicional a este set list y solo para sus conciertos de México; después de “Let ‘em in”, Paul improvisa una canción llamada “Shine a Light in Mexico”; la cual es su manera de agradecer al público mexicano su entrega y sobre todo el espontaneo titileo de la luz de los encendedores al ritmo de las canciones. Este efecto que parece una nube de luces que recorren de adelante del escenario hacia la parte de atrás del mismo es único. El mismo Paul (y otros artistas) han comentado este efecto de luces que el publico genera como “únicamente en México”.
Y es precisamente de esta interacción entre el público, McCartney y su banda de donde el propio Paul abreva de la fuente de la eterna juventud. Amén de las múltiples cirugías plásticas y tratamientos capilares para tapar el paso del tiempo, el rostro de Paul es joven al momento de interpretar sus canciones, de percibir la respuesta de los asistentes a sus conciertos y sobre todo, de que el hombre hace lo que le gusta hacer y … le pagan por hacerlo!
Paul en el escenario, es todo un frontman que sabe que un solo gesto de su mano bastará para tener al publico cautivado. Si, la voz ya no es la misma de hace 30 años, pero el sentimiento, la pasión y sobre todo, la alegría de tocar esas canciones contagia desde sus banda hasta el último lugar en el Foro Sol. A diferencia de otras audiencias, la mexicana se distingue por su desinhibición. El publico mexicano grita, corea, enciende y apaga la luz de sus encendedores al ritmo de la música, llora de la emoción de los recuerdos unidos a canciones y rie cuando Paul bromea en español. McCartney es “el tio” que muchos tuvimos o quisimos tener: ese que es ameno, que tiene un carisma increíble, que sabe entretener y que nos alegra cuando nos viene a visitar.
De los set list, destaca sobre todo la ya mencionada Nineteen Hundred and Eighty Five, el espectacular inicio de “Venus and Mars/Rockshow/Jet”, el (ahora ya) clásico arreglo de Something, A Day In The Life / Give Peace A Chance y su toque de psicodelia hippie, los fuegos artificiales de “Live and Let Die” (que unos weyes pensaban que Paul le estaba haciendo un cover a … Guns’n’Roses!) y sobre todo, la pesada versión de “Helter Skelter”, esa canción proto-heavy metal que está en el disco 2 del “White Album” de los Beatles.
Fueron pues dos veladas mágicas donde Paul rejuveneció no solo los viejos recuerdos de sus canciones, sino también el espiritú de los 110,000 personas que tuvimos la oportunidad de verlo y sobre todo, nos dejó la energía de alguien que encontró en la música en general y en el rock en particular la fuente de la eterna juventud.
Besitos!
Master_E dice
Ja-Ja-Ja-Ja!, ay güey, neta que cómo desestrezan estos ratos y los que me paso con la jefa del pamperro…
juanparty dice
jajajaj mega oinnnkkk