Terry Thompson, dueño de una reserva animal en un pueblo cerca de Ohio, enloquecio y solto a 51 animales salvajes entre ellos 18 tigres, lobos, monos, etc. y después se suicido.
Chicago • Los alrededores de un pueblo en el norte de Estados Unidos son hoy el escenario de un extraño safari tras la fuga de unos 50 animales salvajes, incluyendo leones, tigres y osos, liberados de sus jaulas en una exótica granja por su dueño, quien luego se suicidó.
Policías armados con fusiles de asalto mataron a la mayoría de estos animales sueltos cerca de la ciudad de Zanesville, Ohio (norte). En la tarde de hoy, uniformados todavía buscaban en la zona a un mono y a un lobo, informaron las autoridades.
El incidente comenzó ayer, cuando la policía del condado de Muskingum comenzó a recibir llamadas desesperadas de gente que había visto animales salvajes merodeando por la zona.
Entre 48 y 51 animales salvajes, incluyendo leones, tigres, osos grizzly y osos negros, lobos, e incluso guepardos, fueron liberados de una reserva privada cercana, informó el comisario local.
«Me enteré anoche de que Terry Thompson, el dueño de esta reserva, había abierto las jaulas de los animales antes de pegarse un tiro», dijo el alcalde de la ciudad de Zanesville, Howard Zwelling, a la cadena CNN.
Según él, en la tarde de hoy sólo restaba capturar a un mono y a un lobo, tras sacrificarse desde el martes decenas de leones, tigres, osos y lobos -uno de ellos murió atropellado por un vehículo en una carretera cercana-.
Guardabosques, comandos de élite y expertos del cercano zoológico de Columbus, la capital estatal, fueron convocados para ayudar en la búsqueda al caer la noche y los residentes fueron advertidos de permanecer en sus hogares.
«Cuando llegamos al lugar la noche (del martes) había animales que ya habían cruzado la valla de la propiedad a lo largo de la carretera», dijo el comisario Matt Lutz en rueda de prensa. «La noche estaba cayendo, no se podía correr el riesgo de dejar a estas bestias circulando libremente».
Aunque se intentó capturar a los animales con dardos tranquilizantes, se ordenó disparar «a quemarropa» para garantizar la seguridad pública, agregó. «No estamos hablando del típico gato o perro de una casa. Eran tigres de Bengala de 150 kilos», dijo Lutz.
Todas las escuelas cercanas a Zanesville fueron hoy cerradas y se pidió a los padres que mantuvieran a sus hijos en el interior de sus casas. Además, se colocaron señales electrónicas en las rutas advirtiendo a la población del problema e instando a la gente a llamar al 911 en caso de ver algún animal salvaje exótico suelto.
Lutz dijo que estaba trabajando con la ex esposa de Thompson -quien ya no vivía en la granja- para hacer un recuento final de los animales. El propietario de la finca, Terry Thompson, de 62 años, había sido liberado de una prisión federal hace tres semanas tras haber cumplido una condena de un año por cargos de porte ilegal de armas de fuego, informó la policía.
Según un diario local, el Columbus Dispatch, los agentes del FBI allanaron la finca en junio de 2008, donde incautaron más de 100 armas de fuego, y el fallecido Thompson ya había pagado multas por dejar a sus animales sueltos».
«Esta reserva nos causa problemas desde hace muchos años», dijo Lutz. «Hemos recibido muchas quejas y fuimos varias veces a inspeccionar el sitio». De acuerdo con una vecina entrevistada por el diario, la esposa de Thompson le había dejado poco antes de la tragedia.
Esta vecina, cuyos padres son dueños de una finca cercana, dijo que el hombre solía visitarlos en busca de ganado muerto para alimentar a sus animales. «En la piel tenía marcas de arañazos», dijo.
Los investigadores aún no han logrado que la finca sea un lugar completamente seguro y Lutz no dio detalles sobre cómo murió Thompson, aunque dijo que en su cuerpo mostraba rastros de haber sido «molestado» por los animales.
CARLOS ESTRADA dice
INNECESARIO FUSILAMIENTO DE ANIMALES EN VÍAS DE EXTINCIÓN EN OHIO, EE.UU.
Este despiadado exterminio de fauna salvaje en EE.UU. muestra al mundo la mentira norteamericana del cumplimiento de normas de “protección animal” tan promocionado en publicaciones, en convenciones internacionales y EN DOCUMENTALES DE “ANIMAL PLANET”.
Opino como entendido en comportamiento, enseñanza, rehabilitación y derecho animal, con experiencia directa en manejo de leones, tigres, caimanes, leopardos, lobos, osos, etc. (por supuesto, sufrí graves ataques de especies peligrosas). Mi nombre figura en decenas de extensos cables de prensa de AFP al mundo (entre 1987 y 1993 aproximadamente), en más de cincuenta artículos escritos por un ecologista escocés en el diario inglés “The Buenos Aires HERALD”, en libros europeos (fui entrevistado tres veces por un conservacionista inglés que vivió en Kenya y Tanzania, África), notas en revistas jurídicas y de instituciones nacionales, con innumerables elogios de legisladores asentados para la historia en Versión Taquigráfica N°42 del H.C.D. de la Ciudad de Buenos Aires en 801 páginas -sesiones públicas ante la prensa internacional en la década del ’90-, noticias publicadas en varios centenares de diarios de todas partes, varios reportajes de una radio de Australia sumado a agradecimientos diplomáticos por rescatar fauna de ese país; fui entrevistado por un camarógrafo de profundidades del ecologista francés Jacques Cousteau y del documentalista español y experto en fauna Félix Rodríguez de la Fuente; he impulsado en 1986 la primera condena en la historia del Poder Judicial argentino contra un traficante ilegal de fauna y publiqué numerosos trabajos acerca de la conducta de guepardos, perros, serpientes, caballos, monos, arácnidos, etc.
En mis inicios colaboré con los más destacados científicos de áreas oficiales de distintas especialidades, con herpetólogos y zoólogos de centros de investigación y trabajé con ex directores de reservas de fauna del exterior; realicé experiencias en todo tipo de terrenos y climas, sufriendo enfermedades, accidentes y heridas en emboscadas de traficantes; he estudiado durante décadas el mundo animal, investigué negociados y logré la incautación de reiterados millares de ejemplares salvajes vivos, pieles y cueros de la caza furtiva y contrabando por muchos centenares de millones de dólares, récords nunca igualados en el mundo.
Sé que Argentina no ha sido buen ejemplo en cuidado de especies vulnerables, permitiéndose durante décadas actos de crueldad y sostenida impunidad a negociados con animales, incluso fuerzas policiales han matado a balazos leones fugados de circos y zoológicos y pumas inofensivos que se acercaron a poblados corridos por perros y buscaron refugio en árboles, es decir, en este país se hace vista gorda a los peores crímenes contra la Naturaleza, tanto en el Sur como en montes y selvas de provincias del Norte, descuidándose pasos fronterizos; se desprotegen parques nacionales; se consiente el maltrato de fauna cautiva en zoológicos oficiales y privados; los circos movilizan fácilmente ejemplares de dudoso origen; hay matanzas de especies vulnerables en cotos de caza donde almacenan ilegalmente para atraer turistas extranjeros; no se controla la venta (prohibida por ley) de animales autóctonos y contrabandeados en ferias públicas; son lastimados diariamente millares de caballos –muchos provenientes de actos de cuatrerismo- que arrastran carros en calles del país por vacío legal, tolerada anarquía y “acuerdos” de trastienda con autoridades municipales; aumenta el hacinamiento y eutanasia de perros y gatos en institutos oficiales de zoonosis; nadie impide los crueles experimentos con animales en intocables laboratorios; influyentes industriales del cuero y peleteros (no generalizo) trabajan con gran porcentaje de especies del mercado clandestino, PERO… LA MATANZA DE TIGRES, LEONES, OSOS, ETC., QUE HICIERON LAS AUTORIDADES POLICIALES EN OHIO (EE.UU.) nos muestra la insensibilidad oficial que reinaría en esa nación, caso de promocionadas invasiones a países lejanos para “arreglar” peleas ajenas (supongo con fines de conquista), metiéndose impunemente en territorios extranjeros, intimidando y matando a centenares de personas.
Hubiera sido posible dominar a los animales salvajes que escaparon de la tortura carcelaria, pero faltó profesionalismo y coraje, por eso lo resolvieron de la manera más “cómoda” como hacen en Argentina (reitero: casos de pumas, leones, etc.). Califico de hecho cobarde recurrir al “gatillo fácil” policial -permitido por gobernantes y aceptado por autoridades de fauna-, bajo pretexto de “proteger al pueblo y prevenir agresiones”.
Conste que conozco bastante del tema. Si se hubieran organizado con rapidez y correctamente, en pocas horas tenían el problema controlado SIN NECESIDAD DE SACRIFICAR TANTOS ANIMALES EN VÍAS DE EXTINCIÓN ¿para qué permiten oficialmente “colecciones” privadas de fauna?
Fue una vergüenza el acto irracional. Parece que no respetan la vida humana a la hora de abusar de poder bélico y tampoco se conmoverían al ordenar asesinar a balazos a decenas de animales que estaban en poder de un individuo con presuntos conflictos económicos y psicológicos.
CARLOS ESTRADA *periodista de investigación y proteccionista independiente con decenas de certificaciones oficiales y científicas y máximos reconocimientos internacionales. Documentada trayectoria pública desde 1970.
Buenos Aires, Argentina, 31 de octubre de 2011.