53 millones de pesos a la basura

Ahora que ya andamos “pre-encampañados” a todo lo que da, viendo en la prensa escrita e ilustrada que ya se andan dando sus buenos agarres unos y otros, unos andan en su onda amorosa, que van a generar 7 millones de empleos en menos de lo que canta un gallo mudo, otros mandandole pasteles a Peña Gel boy, queriéndolo mandar a la nocturna casi casi, «que si yo soy la señora de la casa, que mi gallo es gallina», y puras linduras de ese tamaño. Ya sabemos los mexicanos
Cuanto nos va a costar que el IFE regule todo ese Show electoral?
Y si a nosotros, no al IFE, porque el dinerito ese va a salir de los que nos quitan de impuestos, del salario de ustedes mis respetables bloggeros y del mío también, va a salir del bolsillo «mágico» de la gente que trabajamos día a día, y digo mágico porque en estos tiempos uno tiene que ser más cabrón que Harry Potter, para estirar nuestros sueldos y que más o menitos nos alcance para vivir ahí pasándola.

Aunque claro que no falta el burro que dice que con 6,000 pesos se puede vivir con carro, con casa y pagando colegiaturas (en que país? que me diga para mudarme pa’lla!!) Pues en esos pensamientos estaba cuando me encontré con este escrito de Carlos Puig. Se los comparto, para que sepan en que se van a perder próximamente 53 millones de pesos. Saludos a la respetable comuna bloggera y muy buen dia 🙂

53 millones de pesos a la basura El monitoreo que realizará el IFE a noticiarios de radio y televisión del país es de esas cosas que desafían el sentido común. Se trata de que el instituto, con su dedo flamígero, acuse a algunos medios de ser “inequitativos”. Quién sabe con qué autoridad o con qué parámetros, porque hasta donde yo sé, ellos saben de elecciones, no de periodismo. Pero lo harán.
53 millones de pesos le va a costar al Instituto Federal Electoral monitorear los noticiarios de radio y televisión del país. No tengo idea si es mucho o poco para la tarea, ya hay otros que andan en eso y pronto lo dirán. Creo que es una buena idea encargárselo a la UNAM. La mala idea es el monitoreo en sí mismo. Y es mala idea porque no sirve de nada.

Este monitoreo, aclaro, no es el que se debe hacer para que la radio y la televisión sí transmitan los miles y miles de spots. No. Este es aquel en el que se analiza cada nota, cada comentario, cada reportaje electoral, se le asigna una “calificación” que intenta describir la manera en que se trató la información electoral y luego se reporta qué tanto y de qué manera se habló de una organización política o su aspirante.
En las últimas elecciones, por ejemplo, a lo que yo hacía en radio no le iba bien porque no hablábamos mucho ni del Verde, ni del Panal ni del PT o Convergencia. Es decir, hablábamos tanto como se merecen para los pocos votos que tienen. Pero no. Había que hablar tanto como del PRI o el PAN o el PRD para que el IFE nos pusiera una estrellita en la frente. También hablaba yo a veces mal del Verde y su dueño socialité. Y eso al IFE no le gusta. No es equitativo. Mal periodista, malo.

Esto del monitoreo es de esas cosas que desafían el sentido común, que quienes están involucrados tienen que guardarse la sonrisa o la vergüenza, pero que de todas maneras hacen ceremoniosamente.
En esta semana se firmó el acuerdo entre la UNAM y el IFE —hubo fotos muchas en la prensa— y el propio comunicado es una cosa encantadora.
Va: “Ante el consejero electoral Benito Nacif; el secretario ejecutivo del IFE, Edmundo Jacobo, y el director de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, Fernando Castañeda, el presidente del instituto, Leonardo Valdés, afirmó que este sistema de monitoreo sobre noticias emitidas por los medios de comunicación no coarta la libertad de expresión, sólo busca brindar mayor equidad a la contienda electoral”.
¡Caray! No coarta la libertad, pero quiere brindar equidad. ¿Cómo? Si ejerciendo su libertad de expresión un noticiario quiere ser inequitativo, y el instituto no puede sancionarlo, cómo brinda equidad.

Por cierto, el periodismo siempre será inequitativo, según los parámetros de la ley electoral. Ésa es otra discusión.

Sigue el comunicado: “Este monitoreo será un instrumento valioso para medir el alcance de las notas y piezas informativas que se transmiten en los noticieros que impacten en el proceso electoral federal 2011-2012. De ninguna manera será un medio para coartar los principios de la libertad de expresión y del ejercicio de la información que los medios de comunicación tienen para expresar sus opiniones e ideas, afirmó Leonardo Valdés”.
¿Entonces? ¿Sólo queremos saber? ¿Nos sobran cincuenta y pico millones de pesos y nos dieron ganas de saber?
No. No sólo eso.
“El consejero presidente informó que los resultados que arroje este sistema permitirán que el IFE difunda a la sociedad mexicana, cada 15 días, a través de los tiempos del Estado y en la página de internet del órgano electoral, toda la información sobre el tratamiento que se haya dado a las precampañas y campañas de los precandidatos y candidatos a presidente de la República, diputados y senadores del Congreso de la Unión”.

Se trata de que el IFE, con su dedo flamígero, acuse a algunos medios de ser “inequitativos”. Quién sabe con qué autoridad o con qué parámetros, porque hasta donde yo sé, ellos saben de elecciones, no de periodismo. Pero lo harán.
Sin ninguna consecuencia. 53 millones de pesos….Para exhibir noticieros y periodistas mal portados.

Y, por supuesto, para dar un arma a quien pierda la elección para tener a quién culpar. No fui yo. Fueron los medios inequitativos, dirán.

El presidente de la Comisión de Radio y Televisión del IFE apuntó: “Este proyecto tiene para el IFE un valor muy importante por el hecho de que los propios comunicadores, representados en la Cámara de la Industria de Radio y Televisión, así como en la Red de Permisionarios y diferentes agrupaciones de permisionarios, tomen este instrumento como un medio de autorregulación, con el propósito de contribuir a una cobertura noticiosa de precampañas y campañas basadas en dos grandes principios democráticos, la equidad de la cobertura y, en segundo lugar, un decir noticioso, imparcial y objetivo, aseguró Benito Nacif”.
Me cuentan que se vio al consejero Nacif ruborizado cuando decía esto.
53 millones de pesos… En este país.

Eso sí, que nadie se extrañe si al final de esta elección el IFE no podrá probar una sola transacción económica —ilegal— entre partidos y medios electrónicos.