A propósito de los comentarios generados en dos posts atrás, referente a la película Titanic, considero que sí, que no se le puede negar las inversiones que se le hicieron (y no sólo de $$, sino de tiempo, producción, dirección, etc), que en verdad se investigó bastante, que el soundtrack le dio la vuelta al mundo, que la película fue de las realizaciones más costosas en la historia del cine …En fin, que fue un megaproyecto y bien hecho, eso, ni quién lo dude.. pero (ahí viene el pero) en verdad es penosa, trinunfadora, pero penosa…
La HISTORIA deja mucho qué desear, no muestra nada antes no mostrado, no propone… Con esto quiero decir, que no hay que dejarnos llevar por la ilusión, sí, la película está chila, entretiene, te da oportunidad de mostrar tus sentimientos (recordemos la escena de los viejecitos acostados juntos esperando la hora de su muerte… triste, no?), y una bola de etcéteras más, pero -insisto- esos argumentos -y los anteriores- no son, a pesar, los únicos válidos: «cómo está esto?» te preguntarás «qué más quieres?» lo que quiero EN ESTA OCASION CON MI COMENTARIO es que se trate de valorar a una película no sólo por su empaque (parafernalia, soundtracks, actores-actrices al estilo J. Roberts…) sino por lo que proponga, por su contenido, por lo que hay dentro de ella y de sus creadores: precisamente ése es el principal punto: por el proceso que ha llevado al creador a realizar tal película: por qué la hizo así? por qué enfatizó tal detalle…
Hay que descubrir lo que hay detrás de lo que ven nuestros ojos, y eso se logra a partir de ver películas que no sólo nos entretienen: se logra a partir de ver películas que nos desgarran, que nos lastiman por lo intenso de su contenido, por las experiencias de su creador…
Por citar un ejemplo, el viejito que dirigió el Señor de los Anillos, Peter Jackson, resulta que es considerado el rey del cine gore en Nueva Zelanda (su país de orígen) y que (quién lo hubiera pensado) dirigió películas con alto contenido emocional y que causan reacciones encontradas en el espectador: eso es lo que espero, que nos muevan las víseras con sus películas y no sólo las lágrimas y los mocos, que nos hagan sentir: que nos hagan amar o si es necesario, odiar al personaje… que nos hagan ver más allá de lo que ven nuestros ojos.