El terremoto de 8.1 grados en la escala de richter que sacudió a la Ciudad de México, D.F. el 19 de septiembre de 1985 a las 7:19 a.m. tuvo una intensidad similar el poder devastador de mil 114 bombas atómicas de 20 kilotones.
Miles de vidas se perdieron, tantas que no hay un calculo exacto, ya que en su momento el Gobierno reconocía aproximadamente 10 mil muertos y 50 mil heridos, años después esa cifra subió a un aproximado de entre 35 mil a 40 mil muertes.
Sin duda es una de las peores tragedias en la historia de nuestro pais, en la que se pudo ver la solidaridad de la gente que sin pensarlo dos veces, se sumo a los esfuerzos de salvamento,
Hoy no podia faltar el Presidente Calderon, que al mas puro estilo de Vicente Fox, sale con su comentario pendejo desafortunado, que dice así: «Para salir adelante y enfrentar los retos del País, se requiere del México solidario que despertó de los sismos de 1985.»
La falta de sensibilidad de Calderon, parece no tener limites, queriendo equiparar la unión de los Mexicanos en una tragedia a su mal gobierno, instando a la unidad colectiva, para resolver la falta de eficiencia de su gobierno.