Post enviado por: Liliana siguela en twitter @Lilipadilla
“Pequeños gigantes”
Una crítica constructiva.
Respetarse a sí mismos y a los demás es uno de los valores que más considero importante en la educación de los niños.
Esperamos que nuestros hijos nos traten con el respeto debido y que sepan respetar a los demás. Pero ¿respetamos nosotros a nuestros hijos en la misma medida?
Cuando empezaron a anunciar Pequeños gigantes, algunos buenos recuerdos llegaron a mi mente y pues con todo ello me forme una expectativa muy grande del programa fundamentada totalmente en las memorias llenas de nostalgias de mi infancia.
Y es que según manejaba la publicidad, era un evento muy similar al de “JUGUEMOS A CANTAR”, un Festival hermoso, lleno de creatividad, –a la época en que fue realizado– en donde niños demostraban dotes histriónicas y de canto, con canciones hechas por los compositores de renombre de esa época y los temas muy ad-hoc para los niños.
Como dije tenia puestas altas expectativas en este programa, ya que por lo regular no soy asidua a la televisión prefiero la lectura o las series americanas en última instancia, pero bueno este programa prometía mucho y pues, ¿porque no verlo?
En parte es reconocible el esfuerzo en la selección, ya que la mayoría de los niños son talentosísimos en especial una niña de nombre Magabi, pues todo iba excelente, pero ya al transcurso del programa puedo ver con profunda decepción la explotación a la que están siendo sometidos los niños en pro de entregar un producto de entretenimiento para adultos, ¡si! para adultos.
Los niños participan cantado canciones de temática adulta, que muchas veces no comprenden lo que están cantando y que en base a su talento pues salen adelante con la interpretación, los niños de 6 o 5 años que no saben ni hablar, pero les ponen diálogos y escenas que no son su contexto. Sobre todo cuando toman algunos de los jueces y simulan escenas de amor.