Honorable Sr. Bejarano:
Con gran alegría me enteré que Ud. y su distinguida esposa, Dña. Dolores Padierna, se han inscrito para competir por una candidatura en las H. Cámaras de Diputados y Senadores, respectivamente.
Y lo digo con una gran alegría, porque gente como Ud. y su Honorable esposa, representan lo que justamente México necesita.
Gente honesta y ética como ustedes dos. Gente que no sea transa, que crea en la democracia y que por supuesto, no imponga en su partido a ningún candidato.
Gente como ustedes que sepan lo que está pasando en el mundo. Gente como ustedes, que apoyarían con mucho agrado, la participación de empresas del sector privado en la industria energética, como en Cuba y Brasil.
En fin, gente como ustedes, que esté súper comprometida con México. Gente que quiere acabar con las tribus en el DF, para que aquí, exista mayor democracia.
Que no acepta ningún tipo de sobornos y que menos chantajee a las personas.
Gente como ustedes, que con un enorme grado de civilidad aceptarían al ganador de la próxima elección sin importar el Partido que sea.
Estimado René:
No tienes idea lo que significaría para mí que ganes esa elección. Que ganes esa diputación, significaría para México que… Finalmente, tendríamos a un verdadero líder en la Cámara.
Un líder que —gracias a sus valores éticos— pudiera crear El Código de Ética para los diputados. Un Código tan necesario que solamente una persona como tú, lo puede generar.
Mismo Código en el cual, tu Honorable esposa, lo pudiera complementar para la Cámara de Senadores.
Sin duda, un maravilloso porvenir.
Un porvenir en el que finalmente los Partidos se pondrán de acuerdo para sacar adelante a México. Un porvenir en el cual nos representarás con dignidad y profesionalismo, cuando tengas que saludar a Mandatarios extranjeros que nos visitarán.
Y tus viajes a Washington… ¡Qué maravilla! Imagínate…
Escaparte para ir de shopping, en lugar de aguantar a esos Congresistas gringos aburridos. O que cuando vayas al funeral de Fidel Castro (si es que te toca)…
Lloriquees como una Magdalena porque se te fue el paladín de la democracia.
En fin mi estimado René. Ahora sí vas por el camino correcto. Ya se acabó el malentendido de las ligas. Ya se acabó la mala leche de los medios de comunicación que te difamaron injustamente. Ya se acabó la Ley del Hielo que te hizo tu patrón —perdón— tu colega Andrés Manuel.
Empieza una nueva era.
La era de René Bejarano. Primero diputado, después Secretario de algo o de alguien, después a la Cámara de Senadores y para terminar en… ¡La Presidencia de la República!
Se te hizo justicia. Se hizo realidad de que el que persevera… alcanza. Y se te hizo realidad del México de izquierda del siglo pasado.
¿Qué padre sería verdad? Pero neta neta… Aquí hay una realidad:
México es —por mucho— un país mucho más inteligente que tú… Mucho más. Así que… Ni lo sueñes.
Porque ni en sueños ni en una película de ciencia ficción lo lograrías.
(Vaya pesadilla que tuve)…
carlos@alazraki.com.mx